Contenidos que alimentan la Red

El fenómeno de la cocina en Internet no es nuevo, pero no por eso deja de ser un fenómeno.

La cocina en la Red es un fenómeno por el impacto que tiene, creciente en la cantidad y calidad de las pubicaciones relacionadas, y, sobre todo, por el impacto también creciente en las dinámicas sociales, en la cesta de la compra y, por consecuencia, en las cuentas de resultados de las empresas de alimentación y en todos los sectores relacionados con la Comida, la Cocina, la Restauración y el Lifestyle.

Por eso es un fenómeno, y no parece que la perspectiva a corto y medio plazo sea que deje de serlo, más bien al contrario.

Cualquier momento es apropiado para hablar de cocina y alimentación, y lo es particularmente ahora, puesto que estos días se está celebrando en Barcelona una de las Ferias interancionales del sector de la alimentación más importantes del mundo: Alimentaria 2014.

Lewis & Carroll - Content Marketing

Para quienes llevamos ya unos cuantos años trabajando en el sector de la Alimentación es un hecho indiscutible que los contenidos relacionados con la cocina conforman una temática que, como muy pocas, crecen en cantidad, calidad e influencia. Y también es un hecho que el sector de la Alimentación tiene mucho que ver en el desarrollo de eso a lo que llamamos “Content Marketing”.

El Marketing de contenidos y el sector del Food & Beverage avanzan juntos y están impulsando, fortaleciendo e innovando en la relación entre Marcas, Consumidores e Influencers.

Nuestro trabajo para Marcas de referencia como Nestlé Postres, La Lechera o Nescafé Dolce Gusto nos demuestra día a día que la cadena de valor se redefine y se enriquece, igual que el rol que cada uno de los actores desempeña, y desempeñará, en la Gran Conversación.

La cocina en cifras.

A través de nuestra unidad de NetIntellingence, en Lewis & Carroll observamos y analizamos constantemente cómo evolucionan en la Red tendencias, temáticas, contenidos y relaciones. En lo que a las cosas de comer se refiere, estos son algunos datos interesantes: Sigue leyendo

Muchos datos y pocas nueces

Este post también podría titularse «La no explotación de las Bases de Datos«.

Muchas veces tengo la sensación de que nos hemos vuelto todos un poco locos (solo un poco). Tengo la impresión de que muchas veces nos dedicamos a acumular datos y datos, que creemos que necesitamos saber todos los datos sobre nuestros clientes… y luego no sabemos qué hacer con ellos. ¿Cuántas veces habremos oído y leído eso de: “no, si yo tengo una base de datos de tantas mil personas” – hasta ahí bien – “pero ahora no sé qué hacer con ellos” – ¡pues vaya!-?

La no explotación de las BB.DD.Y es que entre tener una base de datos sin explotar o no tenerla, pues sinceramente no sé qué prefiero; por lo menos, en el segundo caso, no necesito de espacio para almacenarla. Para mí, y disculpad el símil, tener una base de datos sin explotar es como tener el teléfono de ese “vecino guapo del piso de abajo” al que nunca vas a llegar a llamar: está bien tenerlo en la agenda, pero de poco más nos va a servir si no tenemos intención de hacer prosperar el contacto e invitarle a tomar algo algún día.

Os animo, pues, a llamar al vecino e invitarle a cenar, o lo que es lo mismo, a explotar esos contactos que tenéis almacenados sin sacarles beneficio ninguno. Sigue leyendo

De la importancia de la primera impresión

Este es mi primer post oficialmente hablando. Sí, me estreno y quería hacerlo dando una buena impresión. Y es que en el mundo offline todos tenemos clarísimo que, si bien no siempre es la más acertada, la primera impresión cuenta (¡y mucho!)… y estaré encantada de montar un duelo al más puro estilo del oeste con quien ose decirme lo contrario.

Como decía, acertada o no, sea como sea la primera impresión importa y eso no deja de ser menos cierto en la red. ¿Nos hemos preguntado alguna vez cuál es el primer impacto que recibe alguno de los usuarios de nuestra marca?

The power of first impressionYo (y supongo que muchos) lo primero que hago para enterarme sobre alguna información que me interesa es entrar en la web y rebuscar por los parajes online. Si me parece que el contenido de la web que encuentro puede ser interesante, pues me apunto al carro; si no, “adiós muy buenas” y “si te he visto, no me acuerdo”… y seguramente no nos volveremos a ver más. Sigue leyendo